Datos en 27.005 Khz AM

El uso de servicios en las
frecuencias de 27 Mhz, y más concretamente dentro de las 40
frecuencias asignadas al uso de Banda Ciudadana (CB), genera cierto
debate ente quienes consideran que ha de ser exclusivo para este tipo
de radioafición y quienes no encuentran problema alguno en compartir
este espectro, además de otros interesantes puntos de vista que haya
más allá de la dualidad.

Con este comentario
quisiera dar una oportunidad a pensar en la la posibilidad de
aprovechar las señales de servicios en 27 Mhz y considerarlas
apreciadas balizas para conocer el estado de la propagación.

En los primeros días del
mes de julio de 2019 dispuse de un antiguo equipo President Grant con
antena Tagra de 1/2 onda para escuchar el posible tráfico de
embarcaciones por la costa de Cantabria. Cual fue mi sorpresa que
recibía con muy buena señal una emisión en modo digital, modulada
en AM y ninguna procedente de embarcación alguna. La situación era
del todo coherente: una radio de los años 80, una antena de los años
80 y una señal típica de los años 80. Pero la realidad es que era
el año 2019. Esto empezó a ser interesante por lo exótico.

Durante los periodos de
escucha descarté que se tratara de una emisión local debido los
característicos desvanecimientos y horario de recepción. La antena
ominidireccional estaba poniendo esos días buenas señales
procedentes del Bajo Guadalquivir. Era lo más que alcanzaba a
concretar al identificar a los hablantes en ese canal.

Aprovechando las
vacaciones hice un seguimiento por diveros lugares y el resultado fue
desconcetante pues, además de escucharse en diversos lugares del
norte, como cabría esperar, también se recibía en el centro
penisular, aunque con menor intensidad. Todo esto hacía extraño que
se tratase de una emisión con origen en las provincias de Sevilla,
Huelva o hasta de Cádiz, comarca que habitualmente pone buenas
señales en el oriente de Cantabria, pero no el centro, según mi
experiencia.

A falta de otros medios,
consideré la posibilidad de dirigirme a algunos radioclubs de la
zona que consideraba propicia a fin de consultar si recibián en modo
local esta señal. La amable y enriquecedora respuesta fue que no
conocían esa señal. Esto hacía más interesante una señal que
parecía tribial y se resistía a desvelar su origen.

En realidad disponía de
mucha información que podía utilizar para identificar la señal,
por ello presté atención a sus características que me hacían
pensar en un buscapersonas, tipo POCSAG 512. Probé con diversos y
avanzados programas decodificadores al alcance de radioaficionados y
profesionales, pero no conseguí decodificar la señal. No obstante,
opté por ahondar en esta vía observando que en España los
servicios de buscapersonas habían sido cancelados en 2012 cuando
únicamente ya funcionaban en UHF.

Descartado España como
origen, dentro de la lógica de la legalidad, me orienté a los
países vecinos, donde se mantienen estos servicios en frecuencias de
27 Mhz. Hice una ronda de consultas a radioclubs de Italia, con 180
solicitudes y muy amables respuestas por buena parte de los colegas
de ese país. El resultado fue negativo en cuanto a la recepción.
Continué por Francia, con excelentes colaboradores entre los 190
radioclubs consultados y sin testimonio de la señal. Portugal
esperaba que fuese la conclusión, pues el Algarve es una comarca con
la que es muy frecuente el enlace desde Cantabria. Las noticias
continúaban en la misma línea y llegué a pensar que era el único
que escuchaba esta señal en el mundo. Acaso la solución era médica
más que radioeléctrica. Pero el mensaje de un colega desde la
proximidad de Coimbra haciéndome saber que también recibía la
señal amainaba lo que ya empezaba a ser preocupante: entre 0 y 10
grados con antena directiva de cuatro elementos y vía propagación.
Estaba sano. Este dato fue fundamental. Nos quedaba por delante
Galicia y lo que hay más allá: Irlanda.

El sondeo por Galicia fue
negativo. Al menos un colega me indicó que un hospital de A Coruña
había tenido en uso esa frecuencia para el servico de buscapersonas
hacía más de 20 años.

Acotado el sendero, hice
consultas por diversos radioclubs de Irlanda. Un colega me informó
que actualmente la frecuencia 27.003 Khz estaba concedida al hospital
de la ciudad de Waterford, en el sureste de Irlanda. Esta información
fue definitiva.

En el aréa de Waterford
me confirmaron que recibían la misma señal que la muestra que les
había hecho llegar y sí correspondía al buscapersonas del hospital
de Waterford.

El enlace era del todo
verosímil: 1.040 kilómetros con el mar por medio, pero ¿como
explicar el hecho de no poder decodificar la señal con los medios
tan sofisticados y al alcance de cualquier interesado? Bien sencillo,
hoy basta con modular en AM para hacerse invisible en la era del 5G.

La actividad fue muy
agradable ya que finalmente alcancé conocer el origen de esta señal,
que era el objetivo marcado, y hace que sea úitl como baliza, pero
también conviene destacar la fragilidad de los tantos y tantos
límites ficticios cuando prima el sentido de la radioafición,
independientemente del territorio o banda de frecuencias de trabajo.

Mi agradecimiento a todos
los que hicieron posible estas conclusiones.

Alberto CA-23 / EA1IWL

Valle de Villaverde –
Cantabria

Fuente: Alberto CA-23 / EA1IWL

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